"EL DOLOR QUE SIENTO ES INCOMPRENSIBLE, PERO EL ODIO NI EL RESENTIMIENTO JAMÁS ESTARÁN EN MI CORAZÓN"
"EL DOLOR QUE SIENTO ES INCOMPRENSIBLE, PERO EL ODIO NI EL RESENTIMIENTO JAMÁS ESTARÁN EN MI CORAZÓN"
Así se expresa en las redes sociales Susana Ibarrola la madre de Pedro Barreto que el domingo 30 de diciembre fue asesinado en el barrio Salto de Federal. "Una situación espantosa perder a un hijo, porque dicen por ahí que los hijos están preparados para enterrar a sus padres y no así como hoy me toca enfrentar", escribe la mujer y agrega: "esperaré justicia aquí en la tierra con la del hombre y en el cielo con la de Dios".
EL RESTO DEL ESCRITO MANIFIESTA.
"Es una sensación que no se la deseo a nadie, en los dos casos es horrible. Yo perdí a mí hijo, pero el ya no va a sufrir más. En cambio es él, el que le hizo daño a mi hijo quien va a sufrir, no le guardo para nada de rencor.
La mezcla de angustia y de ira, siento por su madre que jamás a sabido educar a sus hijos, hijos que no saben los que es el valor de la familia, el afecto y amor. Esclavos propios de su contexto, expuesto a extremas situaciones.
Hoy estoy aquí y así, pero jamás pensé que iba a ser así. El mundo da muchas vueltas y cuando a uno le pasa ahí es la oportunidad para aprender y darse cuenta del respeto que debemos guardar por la vida. Por otro lado, me siento muy feliz por la gente que me conoce y sabe como soy.
Gente que me ha acompañado en mi dolor, y que saben que yo sola con esfuerzo y sacrificio he criado a mis hijos. Agradezco a mi familia que jamás me ha dejado sola, yo estoy muy tranquila porque tengo el afecto de mis hijos y mi marido que son los que me van a sacar adelante.
Odio no tengo, soy muy creyente y creo que dios sabe porque hace las cosas. Creo en el perdón y la compasión, esperaré justicia aquí en la tierra con la del hombre y en el cielo con la de Dios. Pero, hay algo importante que no debemos mirar para el otro lado, y es el desastroso sistema sanitario.
Nuestro hospital que siendo hermosos y grande por decisiones políticas se aya convertido en solo una salita de primeros auxilios. Mi hijo falleció de camino a concordia porque aquí no tenemos los especialistas, ni la capacidad logística para enfrentar situaciones de extrema emergencia.
Debemos preocuparnos siempre y no ahora porque haya pasado con esto. No quiero dejar de agradecer a todo el personal del hospital J.J de Urquiza que se han comportado como debe, y que poco tienen que ver con las decisiones de los verdaderos responsables". Finaliza. (Desde Federal)
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