Sus raíces no aguantaron más
EL VIEJO ALGARROBO CAYÓ SIN VIDA SOBRE EL SUELO QUE LO ALIMENTÓ MAS DE CIEN AÑOS
AUDIO TESTIMONIOS: yeye kilsteins....mp3
Con la caída del histórico algarrobo, el paisaje ya no es el mismo y nuestras miradas buscan ese "árbol" que estuvo allí desde siempre para varias generaciones de federalenses. La noticia no pasó desapercibida y cuando desde los micrófonos de una radio local se lo anunciaba, cientos de mensajes de oyentes trataron de proponer la forma de mantener "vivo" este retazo de nuestra historia lugareña.
"Es una parte de Federal, se merece un monumento, yo hacía "dedo" debajo de su sombra, escribía alguien y desde otro celular se proponía: "Tendrían que ponerlo de pie, hacerle una base de cemento y barnizarlo, para que se conserve". -Plantarle una enredadera (Santa Rita) y eso le daría vida; se apuraba a escribir otro.
El algarrobo es patrimonio histórico nuestro; se lo debería conservar en algún lugar - proponía otro oyente. Podrían trabajar la madera y donar las artesanías y en el lugar plantar un algarrobo nuevo y poner una placa de recuerdo- decía otro mensaje.
Observen en la foto superior de nuestra Revista digital Desde Federal, el enorme tránsito que circula en forma permanente por la zona; ya que esos vehículos no están estacionados sino que van circulando en el momento del registro fotográfico.
La arcada de ingreso al ex barrio Militar es otra postal que identifica a ese sector de acceso norte a nuestra ciudad. Al frente el árbol vencido por el paso de los años espera; sus ramas y su enorme tronco tienen un destino incierto.
Revista Desde Federal entrevistó al Coordinador de Cultura de la MUNICIPALIDAD DE FEDERAL, Señor Luis Arturo Luna; enterado de la cuestión este nos manifestó: " El árbol ya cumplió su ciclo, Dios se lo llevó -parafraseando con la vida humana en la tierra- mi postura es que se plante otro árbol de la misma especie, será como la descendencia del algarrobo que hoy despedimos".
Mas adelante Luna nos decía: " A las nuevas generaciones le contaremos que existió ese árbol en el lugar; ya los poetas le cantaron y escribieron sus glosas y a ciencia cierta no hay nada certificado sobre su historia; fue el pueblo a lo largo de años quien se encargó de narrarla. (Especial para Revista Desde Federal escribe Antonio Silveyra)
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